La transformación digital en el sector educativo colombiano y la adopción de tecnologías educativas se han convertido en la norma, permitiendo la continuidad de la educación para aquellas personas que no cuentan con la posibilidad de realizar sus estudios de manera presencial. Sin embargo, este cambio no está exento de los desafíos en términos de ciberseguridad.
Es innegable que diversos sectores de la sociedad están experimentando un aumento alarmante en los ataques perpetrados por individuos fraudulentos que persiguen ganancias económicas a través del robo de información confidencial.
En este contexto, resulta esencial contar con las herramientas adecuadas y fomentar una concienciación constante acerca de las posibles vulnerabilidades que pueden existir dentro de las organizaciones. Estas medidas son cruciales para proteger los activos más valiosos de cualquier entidad: la información y la confianza de sus partes interesadas.
Ciberseguridad en la educación
El sector educativo se ha convertido en un objetivo atractivo para los ciberdelincuentes. La migración hacia plataformas en línea ha resultado en un aumento de los ataques cibernéticos, como el phishing, ransomware y el robo de datos sensibles. La exposición a estas amenazas puede tener consecuencias graves en la privacidad de los estudiantes y la continuidad de la educación.
Por otro lado, la falta de conciencia y capacitación por parte de estudiantes como docentes pueden carecer de la formación adecuada en ciberseguridad. Esto hace que sean más susceptibles a caer en trampas cibernéticas o tomar decisiones inseguras en línea, lo que pone en peligro la seguridad de la información y la infraestructura tecnológica.
De acuerdo con Ignacio Triana, Líder de Tecnología para MCA de Trend Micro, los retos de seguridad son muchos, “los ciberdelincuentes ven en el sector educativo un objetivo atractivo debido a la gran cantidad de datos confidenciales y personales que se manejan, incluyendo información de estudiantes y profesores. El impacto de un ataque exitoso puede ser devastador, afectando no solo la integridad de los datos, sino también la continuidad de la educación y la confianza en el sistema educativo. Por lo tanto, la gestión adecuada del ciber riesgo se ha vuelto esencial para salvaguardar la educación en Colombia en la era digital”.
Por otro lado, las estadísticas proporcionadas por el Ministerio de Tecnologías de la Información y (MinTIC), el escenario de amenazas en nuestro país está experimentando una tendencia preocupante. En el año 2022, el costo promedio de un ataque de Ransomware alcanzó la alarmante cifra de USD $4.54 millones. Durante la primera mitad de 2022, se registraron 36 mil millones de registros expuestos debido a violaciones de datos, lo que resalta la urgencia de fortalecer las medidas de seguridad.
Oportunidades para el sector
En este dinámico panorama, las soluciones tecnológicas desempeñan un papel fundamental en la creación de ambientes de aprendizaje seguros y efectivos. En este contexto, Trend Micro emerge como un aliado invaluable. Sus avanzadas tecnologías de ciberseguridad no solo protegen la información sensible de las instituciones educativas, sino que también garantizan la seguridad de los estudiantes y docentes en línea, promoviendo así la confianza y el bienestar en entornos digitales.
Las organizaciones de dicho sector pueden emprender una serie de acciones cruciales para fortalecer su seguridad cibernética. En primer lugar, la identificación de activos es fundamental para comprender qué recursos digitales y datos deben protegerse. La gestión de riesgos permite evaluar y abordar posibles amenazas de manera proactiva. Además, es esencial fomentar la concienciación sobre seguridad entre el personal, ya que son una línea de defensa importante. La implementación de monitoreo constante en la infraestructura tecnológica permite detectar y responder rápidamente a posibles intrusiones. Asimismo, la gestión de vulnerabilidades, a través de actualizaciones y parches, garantiza que los sistemas estén protegidos contra las últimas amenazas. Y Por último, un plan de recuperación ante desastres es vital para minimizar el tiempo de inactividad en caso de un incidente grave, y un procedimiento de gestión de incidentes establece un marco para una respuesta organizada y efectiva en caso de una violación de seguridad.
El sector educativo colombiano enfrenta desafíos significativos en materia de ciberseguridad, pero también tiene oportunidades para mejorar su postura de seguridad en línea. La colaboración con expertos en ciberseguridad, como Trend Micro, y la inversión en concienciación y formación en ciberseguridad son pasos clave para garantizar la protección de datos y la continuidad de la educación en un entorno digital en constante evolución.