jueves, diciembre 18, 2025

Las empresas que rediseñan sus procesos con IA lideran el mercado



McKinsey & Company, a través de su unidad de inteligencia artificial QuantumBlack, publicó la nueva edición de su estudio global “The State of AI 2025”, un análisis sobre el estado actual, la adopción empresarial y las implicaciones estratégicas de la inteligencia artificial (IA). Los resultados muestran que, aunque se ha consolidado como una herramienta fundamental para las organizaciones, su impacto a escala empresarial sigue siendo limitado.

Adopción amplia, pero con desafíos para escalar
El informe revela que el 88 % de las organizaciones encuestadas utiliza la IA en al menos una función, lo que confirma la rápida expansión de estas tecnologías en la última década. Sin embargo, la mayoría de las compañías continúa en fases preliminares: dos tercios todavía se encuentran experimentando o desarrollando pilotos, sin haber logrado integrar la IA de forma transversal en sus operaciones.

La nueva frontera: agentes de IA capaces de ejecutar tareas complejas
Uno de los hallazgos más relevantes del estudio es el creciente interés en los agentes de IA, sistemas que pueden planear, ejecutar y coordinar múltiples pasos dentro de un proceso empresarial. Se destaca que:
  • 62 % de las empresas ya experimenta con agentes de IA.
  • Solo el 23 % ha logrado escalar al menos un caso de uso basado en estas tecnologías.
Los primeros despliegues se concentran en áreas de tecnología de la información, gestión del conocimiento y servicios internos. Sectores como tecnología, telecomunicaciones, medios y salud lideran la adopción inicial.

Las organizaciones líderes adoptan una visión estratégica de la IA
El estudio identifica un grupo de empresas denominadas “high performers”, que sí están logrando capturar valor significativo gracias a la IA. Estas organizaciones han desarrollado un modelo de adopción más maduro que se expresa principalmente en tres pilares:
  1. Visión orientada al crecimiento: utilizan la IA no solo para automatizar o reducir costos, sino para desarrollar nuevos productos, crear fuentes de ingresos y acelerar la innovación.
  2. Rediseño profundo de procesos: integran la IA desde la concepción del flujo de trabajo, lo que permite alcances más amplios y resultados sostenibles.
  3. Inversión decidida: más de un tercio destina más del 20 % del presupuesto digital a iniciativas de IA.
Impacto en el talento: nuevas habilidades y redefinición de roles
Los resultados muestran percepciones divergentes sobre cómo la IA afectará la fuerza laboral:
  • 32 % de los encuestados anticipa una reducción en algunos equipos.
  • 43 % no espera cambios en el tamaño de su plantilla.
  • 13 % proyecta un aumento.
La demanda de talento especializado continúa creciendo. McKinsey señala que la clave no será únicamente contratar más talento, sino capacitar, reentrenar y redefinir los roles para convivir con nuevas tecnologías cada vez más autónomas.

Riesgos emergentes y necesidad de gobernanza
El informe también muestra que más de la mitad de las empresas ha enfrentado riesgos asociados a la IA, siendo los más frecuentes la inexactitud, los desafíos de cumplimiento normativo, y los riesgos reputacionales.

Como respuesta, un número creciente de organizaciones está fortaleciendo sus políticas de gobernanza y adopción responsable, aunque aún queda camino por recorrer para establecer marcos sólidos en todos los sectores.

Según Carlos Andrés Suárez, Socio y Office Manager en la oficina de Medellín, McKinsey & Company de McKinsey en Colombia: “La IA no es solamente una tecnología que genera eficiencias, es un habilitador estratégico. Las organizaciones que la integren de manera estructural estarán en una posición privilegiada para capturar valor y liderar en la región.”