La perseverancia, el esfuerzo y la capacidad de adaptación de los emprendedores vulnerables atendidos por Bancamía, han sido fundamentales para que cerca de seis de cada diez hayan conseguido superar la línea de pobreza en un plazo de cinco años. Así lo recoge el Informe de Desempeño Social (IDS) de la Fundación Microfinanzas BBVA (FMBBVA) en 2022, grupo al que pertenece el banco, que también destaca que el 54% de los clientes mejoró su renta en el último año.
Para conocer las necesidades y carencias de los microempresarios atendidos en Colombia, la FMBBVA desarrolló hace más de una década su propio modelo de Medición de Impacto Social que le permite conocer las características sociales (género, nivel educativo, tipo de vivienda…) de cada emprendedor, el entorno en el que vive (rural o urbano), el tipo de negocio que gestiona, su relación con la entidad microfinanciera (monto y duración del préstamo, ahorro, seguros*, etc.), su salud financiera y, lo que es más importante, su progreso a lo largo del tiempo.
Esta metodología ha convertido a la Fundación en un referente a nivel mundial. Además, es la primera entidad privada en usar el Índice de Pobreza Multidimensional de la Universidad de Oxford para medir las privaciones a las que se enfrentan los hogares de los clientes a los que atienden sus entidades microfinancieras, en el caso de Colombia, Bancamía.
La información detallada que ofrecen las mediciones integradas en este informe permite focalizar nuestra oferta de valor en las necesidades de los clientes, como créditos para mejorar sus excedentes y potenciar las microempresas del país, los seguros* para protección de su salud, familia y negocio, por ejemplo, a las mujeres con coberturas específicas como la maternidad, o frente a los efectos del cambio climático, y una oferta de valor no financiera con acompañamiento formativo, con el fin de maximizar el progreso de cada cliente.
De esta forma, al cierre de 2022, Bancamía llegó a 354.141 clientes de crédito donde el 29% corresponde a clientes nuevos. Se mantiene el foco en las mujeres (55%) y en el ámbito rural (42%), siendo los sectores agro (29%), comercio al por menor (26%) y servicios (21%) los de mayor representación en la cartera.
Un dato importante que destacó el informe es que de los clientes nuevos atendidos, el 90% son vulnerables desde el punto de vista de sus ingresos y el 40% (cerca de 42.000) accedieron por primera vez a un crédito formal, logrando un proceso de inclusión financiera productiva exitoso, al poder acceder a recursos que van directamente para inversión o capital de trabajo que fortalece sus negocios.
Otra de las conclusiones del IDS de la FMBBVA para Colombia es que el 45% de los emprendedores que atiende Bancamía mantienen o han mejorado sus ventas, después de la pandemia, evidenciando que la reactivación ha sido mayor en el caso de los negocios liderados por jóvenes.
Por otro lado, se informó que el 53% de los clientes nuevos y el 55% del total de los que tienen créditos son mujeres emprendedoras. Ellas buscan una mayor diversidad en sus ingresos, puesto que para el 76% la principal fuente de recursos es el negocio, mientras que en el caso de los hombres esta proporción es del 80%, es decir, muchas buscan otras actividades para llevar más ingresos a sus hogares.
A lo anterior se suma que las mujeres tienen un importante reto a la hora de hacer crecer sus microempresas, pues el informe describe que ellos son más arriesgados al asumir nuevos negocios en un 10% de los casos, frente a un 7% para ellas, lo que les permitiría aumentar sus ingresos.
El informe anual también señala que las redes sociales y las páginas web se han convertido en un gran aliado para los emprendedores de Bancamía. Mientras que antes de la pandemia sólo un 14% del total de los clientes con crédito las utilizaba para vender, el porcentaje actual se eleva al 23%, lo que contrasta con la reducción del 39% al 31% de los que usan el canal directo de venta en casa, y del 32% al 24% en local, demostrando que los canales alternativos ganan una importante participación que les permite adaptarse a un entorno cambiante, además de ahorrar costos.
Pero se evidencian, también, importantes retos como la capacidad de ahorro de los emprendedores vulnerables, pues se encontró que el 58% tienen un colchón de menos de 6 meses y el 33% han agotado sus ahorros. También lo supone el hecho de que el 17,5% son pobres multidimensionales y experimentan carencias en educación, salud y vivienda, en el 40% de los indicadores de este índice, siendo los años de escolaridad, acceso a internet y saneamiento los de mayor relevancia.
La discriminación en términos de género
Durante la presentación del IDS de la FMBBVA también fue presentado por primera vez en Colombia el Índice de Instituciones Sociales y de Género (SIGI) que realiza el Centro de Desarrollo de la OCDE, que examina las leyes formales e informales, las normas sociales y las prácticas que restringen los derechos, las oportunidades y el acceso a recursos de mujeres y niñas.
Esta medición establece una puntuación que va de 0 a 100, donde 0 indica ausencia de discriminación y 100, discriminación absoluta. Colombia con una puntuación de 24 es calificada con un nivel bajo en esta materia, estando en línea con sus pares regionales.
Bathylle Missika, jefa de División de Redes, Alianzas y Género del Centro de Desarrollo de la OCDE, enfatizó que aún con el bajo nivel que muestra la calificación, persisten algunas normas y conductas discriminatorias, destacando que el 60% de la población cree que ser ama de casa es tan satisfactorio como tener un trabajo remunerado, el 49% opina que cuando las mujeres trabajan, los niños sufren, el 23% de ellas se han casado antes de cumplir los 18 años, todavía hay muchas que no se han incorporado al mercado laboral y ellas dedican 3 veces más tiempo a actividades domésticas que los hombres.
Por lo anterior, la experta del Centro de Desarrollo de la OCDE recomienda promover una transformación de los roles y normas de género rígidas, reforzar y revisar la legislación de acceso al mercado laboral, además del marco jurídico para evitar el matrimonio infantil sin excepciones.