jueves, junio 29, 2023

Reparar y rehabilitar tuberías y alcantarillados sin excavar ¿Es posible?

 


Si hace algunos años hubiéramos escuchado que se podía intervenir o rehabilitar tuberías sin la necesidad de romper o abrir una zanja no lo hubiéramos creído. Pero por suerte para las ciudades y la sostenibilidad en general, hemos llegado a una era en donde casi todo, es posible. Y es que, existen un grupo de técnicas que se han venido desarrollando alrededor del mundo, para poder cumplir con un objetivo principal y es el de conocer el estado de las tuberías subterráneas y poder instalar conductos cuando incluso no existen sin la necesidad de abrir una zanja. Además, es posible reparar aquellas tuberías que han estado prestando funcionamiento por muchos años y necesitan ser renovadas o reparadas. Estas tecnologías llegan de la mano de Pavco Wavin y su nombre es Zinzanja.

En términos de sostenibilidad, reparar y extender la vida útil de las tuberías es importante. Pues el uso de estas herramientas permite reducir la utilización de maquinarias. Anteriormente, acciones tradicionales como la zanja abierta requerían uso de varias máquinas. Y actualmente, una tecnología Zinzanja reduce el uso de hasta diez veces menos maquinaria. Las reducciones en impactos ambientales se ha comprobado que son al menos de en un 80%.

En ese sentido, tratándose del uso de menos maquinarias, se habla de menos emisiones de gases de CO2 donde se reducen de manera significativa. Sin lugar a duda, se sabe que una de las grandes metas y objetivos que tenemos todos en el planeta, es reducir las emisiones de CO2 para poder contribuir en la reducción del impacto medioambiental por el efecto de gas invernadero. Es así como estás tecnologías promueven acciones concretas en pro del bienestar del planeta.

¿Cómo se rehabilitan alcantarillados sin abrir surcos o zanjas?

 La mayoría de estas técnicas funcionan utilizando el espacio interno que tiene un tubo existente para que, por medio de ese espacio, se aplique una nueva tecnología. Entonces, a raíz de ello, surgen distintas tecnologías Zinzanja, como el CIPP o Cure In place Pipe por sus siglas en inglés, que funcionan como una especie de revestimiento o un manto en fibras de vidrio, impregnados con resinas para poder instalarse al interior del tubo existente y a su vez, ese recubrimiento tiene la capacidad incluso de sustituir por completo las funciones del tubo existente.

Entonces, así es como el propósito de estas tecnologías consiste en cumplir el objetivo de reparar o solucionar los daños dentro de la infraestructura existente sin tener que excavar.

¿Esto se traduce en innovación para las ciudades?

Estas tecnologías representan una innovación importante para cualquier sector, ya sea urbano o rural, pues eliminan o reducen de manera significativa todos aquellos impactos que genera el método tradicional de zanja abierta. Mario Alberto Pérez, Business Manager Smart Water Solutions con renovación sin romper zanja para redes subterráneas en LATAM, manifiesta: “En las ciudades cuando hay una obra a zanja abierta, vemos que se genera todo un caos alrededor de ello, en términos de movilidad, contaminación, afectación del espacio e incluso hay una huella estética porque una obra con el método tradicional de zanja abierta genera impacto visual. Entonces, ¿Cuál es la gran innovación de todas las tecnologías y de las que nosotros como compañía hemos venido adoptando dentro de nuestro portafolio? Es, básicamente hacer ciudades más amigables y reducir todos estos efectos. Estas tecnologías reducen de manera significativa, no solo el impacto medioambiental, sino que también promueven el gozo y disfrute de las ciudades.

¿En qué partes del país se han visto estos beneficios?

Actualmente, las tecnologías Zinzanja se han usado en más de 250 proyectos a lo largo de 15 años. Reconocidas refinerías de petróleo han sido testigos de los beneficios de estas herramientas. Uno de ellos es la reducción en tiempos de intervención al momento de rehabilitar redes de alcantarillado pluvial, así como también redes de uso industrial o aguas aceitosas.

En la capital del país, más de 30 km de redes de alcantarillado se han rehabilitado y al menos un 30% ha sido usando estas tecnologías. Para la Quebrada La Vieja y Las Delicias, se usaron más de 6 tecnologías de diagnóstico distintas, para poder contribuir con el beneficio de reducir impactos medioambientales en la ciudad y es que, casi 32 de ellas fueron utilizadas por primera vez en Colombia.

“Además de reducir todos los impactos mencionados, esperamos poder fortalecer todas las tecnologías existentes, ya que, estos servicios ayudan a alinearnos con nuestro valor como compañía, que es poder aportar de manera sostenible al desarrollo de las ciudades”. Concluye Pérez.