El acelerado crecimiento de ChatGPT y otros sistemas de inteligencia artificial (IA) ha generado amplios debates acerca de su eficacia y la posible reacción de la población ante su uso. En esa línea, dos candidatos a doctorados en el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), realizaron un análisis que arrojó un incremento de un 37% en los niveles de productividad en labores de áreas administrativas.
Sobre este estudio, Alonso Astroza, Data Scientist de GeoVictoria, empresa líder en la automatización de gestión de asistencia en más de 40 países gracias a su capacidad de innovación y adaptabilidad de nuevas tecnologías en los negocios, indica que: “ChatGPT, un modelo de lenguaje de Inteligencia Artificial generativa con capacidad de crear textos, ha alcanzado repercusión viral al alcanzar 1 millón de usuarios en solo 5 días, más rápido que Instagram o YouTube. A pesar de su éxito, la rápida adopción de la IA genera temores sobre la pérdida de empleos y la posibilidad de que las personas sean reemplazadas por algoritmos. Sin embargo, también presenta oportunidades para mejorar la eficiencia y productividad, tal como vemos en este estudio del MIT”.
El grupo de estudio para el análisis consistió en más de 400 empleados de oficina, quienes fueron separados en dos subgrupos para realizar distintas tareas, tales como escritura y edición en la línea de marketing, redacción de subvenciones, análisis de datos y recursos humanos. Uno de ellos utilizó ChatGPT, mientras que el otro no lo hizo.
Quienes utilizaron ChatGPT lograron completar las tareas un 37% más rápido (en 17 minutos versus 27 minutos), con niveles de calidad similares. Además, al repetir las tareas, el grupo que utilizó ChatGPT experimentó un mayor incremento en la calidad, en comparación con el otro grupo.
La producción
Durante el análisis, los investigadores solicitaron a los participantes de la muestra que realizaran una cantidad determinada de trabajo en un lapso de tiempo determinado. Los resultados demostraron un aumento en el volumen de producción, mientras que la calidad del trabajo se mantuvo relativamente estable.
De acuerdo con el informe Technology Vision 2022 de Accenture, 1 de cada 4 empresas en Colombia está interesada en implementar la Inteligencia Artificial, es decir, un 23% de las empresas en el país afirma estar utilizando la inteligencia artificial en la actualidad.
En el plano local, el especialista afirma que “Para garantizar un uso responsable de la IA, es necesario abordar dilemas éticos como la privacidad, seguridad y sesgos algorítmicos, estableciendo políticas de protección de datos, capacitación de trabajadores y marcos organizativos para regular su aplicación. En este sentido, los gerentes y empresarios deben repensar cómo utilizar la tecnología, no solo para reducir costos laborales, sino también para innovar en procesos y entregar cosas de manera diferente, manteniendo a los humanos como parte integral del proceso de producción. Esa será la estrategia que nos permita generar más valor y alcanzar una prosperidad más ampliamente compartida”, indica Alonso Astroza.
A nivel de políticas públicas, Colombia cuenta con una política que plantea las condiciones para potenciar la generación de valor a través de las tecnologías digitales, la cual promueve las condiciones para el impulso de la Inteligencia Artificial como acelerador de la productividad y favorecer el bienestar de los ciudadanos. Este lineamiento se enfoca en cuatro áreas principales: generación de datos digitales, cultura de protección y aprovechamiento de datos, capital humano para la explotación de datos y marco jurídico, ético e institucional, que busca habilitar la generación de valor y reforzar la protección de los individuos en el contexto de disponibilidad y explotación masiva de datos.
Esta política tiene una gran relevancia como condición habilitante para el avance de la Inteligencia Artificial en el país, porque los datos son un insumo clave para una de las ramas de desarrollo de soluciones basadas en aprendizaje automático.