Una tarea pendiente y urgente tienen las nuevas administraciones regionales en la creación y promoción de un adecuado marco regulatorio para los ciclomotores eléctricos, que hacen parte de la movilidad sostenible; así lo indicó Eduardo Visbal, vicepresidente de Comercio Exterior y Sector Automotor de FENALCO, quién afirmó, que este sector necesita reglas claras, toda vez que tal como está la normatividad vigente es de difícil ejecución en la calle y no se adapta a los rápidos cambios tecnológicos de esta tipología.
Si bien es cierto que
la Resolución 160 de 2017 del Ministerio de Transporte define las
características de los ciclomotores, así como las condiciones de registro y
circulación; la proliferación de bicicletas de pedaleo asistido a combustión
(hechizas), se han venido asociando con
problemas de seguridad vial y con los índices de contaminación ambiental, lo que
afecta al sector y por supuesto al desarrollo de movilidad sostenible.
Así por ejemplo,
recientemente Bogotá expidió la Resolución 137609 de 2023, que define por dónde
deben circular los ciclomotores en la capital del país, sin embargo, la
normatividad no es clara en su enfoque hacia las bicicletas de fabricación
hechiza y causa un efecto colateral muy grave a los ciclomotores eléctricos de
la ciudad, desincentivando la movilidad eléctrica liviana en Bogotá.
“FENALCO ha venido
evidenciando, que la falta de claridad técnica respecto de la normativa de
control, hace que termine desincentivando el uso de alternativas de movilidad
sostenible”, agregó el vocero del sector automotor de FENALCO.
“Para que las alternativas de movilidad sostenible sean realmente una opción para los colombianos, no solo se debe fomentar su uso, sino garantizar que los ciudadanos puedan efectivamente desplazarse de manera segura por la ciudad, para lo cual se requiere un marco regulatorio adecuado que además preserve la seguridad vial. Estamos dispuestos a colaborar con las autoridades para encontrar soluciones que promuevan una movilidad sostenible”, concluyó.