Aunque el Ministerio
del Transporte acaba declarar ilegal el funcionamiento de Uber en el país, los empresarios del sector de taxis de Bogotá continúan
alertando sobre los riesgos a que están expuestos los ciudadanos ante
la proliferación de aplicaciones
tecnológicas para solicitar servicio de taxi en la ciudad.
El director Administrativo de Taxexpress, la segunda
empresa más grande de taxis del país, Alfredo Alméciga Cañón, celebró la decisión del Ministerio de declarar
ilegal el uso esta aplicación
para solicitar taxis con vehículos de servicio público especiales; no
obstante, advirtió que sigue latente una
problemática derivada de la anarquía en el uso de las tecnologías puestas
al servicio de la población para pedir
un taxi.
Al respecto Alméciga Cañón subrayó que no se entiende como para el Ministerio “ la contratación y operación de los
vehículos vinculados al servicio público de transporte es responsabilidad
directa de la empresa legalmente constituida y habilitada” y el gobierno no se pronuncia sobre el
funcionamiento de aplicaciones como esy
taxi , Tappsi, el Aguila, y otras más
que están saliendo al mercado, casi a
diario, sin tener el respaldo como
empresas habilitadas para
prestar el servicio individual tipo taxi.
“Simplemente se trata de empresas que utilizan una
plataforma tecnológica al servicio de
los usuarios, sin tener vehículos afiliados directamente, razón por la cual
operan con el parque automotor de las empresas que si están legalmente
constituidas; además de no asumir
responsabilidades de los servicios despachados ”
Lo más grave aún es que con el uso de estas
aplicaciones diferentes a las desarrolladas por las empresas habilitadas
para prestar el servicio de taxi en Bogotá se está encareciendo el servicio, debido al
exorbitante cobro de propinas anticipadas, ya que desde el momento que el
usuario solicita el carro anuncia cuanto
pagará adicionalmente por su
desplazamiento.