El inicio de año marca el primer hito para los trabajadores de menores en ingresos en Colombia, toda vez que sus empleadores les pagarán, antes de febrero 14, las cesantías correspondientes al último año laborado. De acuerdo con Asofondos, bajo el que se agremian las administradoras Colfondos, Porvenir, Protección, y Skandia, en 2019 los trabajadores destinaron un monto de $5,9 billones, principalmente en fines asociados con desvinculación laboral y vivienda, seguidos por educación.
“Solo por concepto de terminación de contrato, vemos que los trabajadores usaron $2 billones, una cuantía importante que refrenda el relevante rol que cumplen las cesantías para proteger al trabajador frente a contingencias como la desvinculación del trabajo”, explicó Santiago Montenegro Trujillo, presidente de Asofondos, quien insistió en la importancia de conservar los recursos de esta prestación social como un ahorro del trabajador para coyunturas de desempleo, en línea con la naturaleza con la que se creó este mecanismo.
Las cifras del gremio también muestran que, en gastos asociados a vivienda, esto es, compra, liberación de deuda, y mejoras locativas, en 2019, los trabajadores utilizaron $3,1 billones. Para efectos de educación superior, el monto destinado fue $600 mil millones.
En los últimos diez años, los trabajadores colombianos de menores ingresos han retirado un total de $39,6 billones por concepto de cesantías.
Asofondos les recuerda a los empresarios que a más tardar el 14 de febrero deben consignarles las cesantías a sus empleados, monto que equivale a un mes de salario, si el trabajador trabajó con la empresa el año completo, o proporcional tiempo laborado.
A los cerca de 6,4 millones de trabajadores que recibirán este año dicha prestación social, el gremio les recuerda que las cesantías son un ahorro de vital importancia, especialmente, cuando el mercado laboral se torna inestable para ellos. Por lo tanto, desde Asofondos recomendamos que las cesantías sean utilizadas en caso de contingencias como el desempleo. En el último año el mercado laboral se ha deteriorado y el desempleo ha aumentado continuamente, ubicándose en promedio por encima del 10% y afectando principalmente a los trabajadores más jóvenes.