Si cada
vez que intenta persuadir a un hombre,
con diferentes argumentos, para ir de compras él se niega, tenga en cuenta que
hay formas de convencerlo. Un
estudio exploratorio del Politécnico Grancolombiano, analizó las motivaciones
que tanto hombres como mujeres tienen para ir a centros comerciales y evidenció
notables diferencias.
Según
el investigador Leonardo Ortegón el género influye en los motivos de compra de
los bogotanos: “los hombres le asignan un valor especial al tamaño del centro
comercial, la disponibilidad de parqueaderos y la facilidad en las vías de
acceso. Para las mujeres, por el
contrario, es más importante la variedad de almacenes, lo “bonito” del centro
comercial, las características ambientales y que el lugar sea agradable”,
aseguró el investigador.
Durante
la investigación se realizó un análisis del vocabulario asociado a motivos de
compra y a 420 encuestas a visitantes de diferentes centros comerciales. Dentro
de otras asociaciones estadísticas demostradas, se encontró que el nivel
socioeconómico también influye a la hora de elegir un lugar para ir de compras.
En
Bogotá las personas de estratos 1 y 2 le otorgan un valor importante a la
variedad de ofertas en la plazoleta de comidas, a la facilidad de ubicarse
espacialmente y a la organización. Los juegos y la buena decoración son lo más
importante para el estrato 3, mientras que
la variedad de almacenes lo es para el estrato 4. Lo moderno y
“prestigioso” está asociado al estrato 5, y el estrato 6 prefiere un lugar que
tenga buena disponibilidad de
parqueaderos y variedad de marcas.
Dentro
de los aspectos negativos se determinó que lo que más critican los compradores
bogotanos es la congestión. En segundo lugar se quejan del difícil acceso vial,
seguido de la excesiva afluencia de personas, la mala distribución de pasillos
y por último, la inseguridad.