En un contexto de creciente interés por la movilidad sostenible, los vehículos eléctricos se han posicionado como una opción atractiva en Colombia, puesto que aunque existe un compromiso de neutralidad climática fijado, las emisiones globales de CO2 alcanzaron el pasado año un máximo histórico a pesar de la desaceleración económica mundial.
Teniendo en cuenta esta problemática y los desafíos que representa, OBS Business School publica su III Informe sobre Movilidad Eléctrica, dirigido por May López, profesora de la escuela y directora de Desarrollo de la plataforma Empresas por la Movilidad Sostenible.
Tendencias para 2024 en el sector automotriz
En Colombia, las ventas de carros nuevos viene en caída, mientras que se revalorizan los usados; el panorama en general del sector ha ido en disminución por los altos precios de la gasolina.
Sin embargo, el campo de los vehículos eléctricos ha ido superando todas las expectativas y estableciendo un nuevo récord histórico en estas tecnologías. En el primer trimestre de 2023 vendieron 2,3 millones de vehículos electrificados en el mundo, alrededor de un 25% más que en el mismo período de 2022. El año pasado finalizó con cifras aproximadas en ventas de 14 millones de unidades a nivel global.
En el caso de los vehículos eléctricos totalizó el año pasado con 3.718 matrículas, experimentando un crecimiento del 13,6 por ciento respecto a 2022.
López afirma que “los vehículos eléctricos que más se venden, son los de mayor precio, pero que al mismo tiempo son poco eficientes y por ello más contaminantes no solo desde el punto de vista del consumo de energía y materias primas, sino también de su producción. Estos vehículos, además de requerir más energía eléctrica por tener un peso más elevado, también generan más partículas ultrafinas por la degradación de sus neumáticos, y además requieren mayores baterías, a menudo dos o tres veces más grandes que las de los automóviles pequeños”.
Si bien la oferta de vehículos eléctricos no deja de crecer, el informe considera que la disponibilidad de alternativas en el mercado todavía es insuficiente. Asimismo, considera que “se debería poner a disposición de los compradores información completa sobre el coste del ciclo de vida completo del vehículo, para facilitar la toma de decisión, porque es posible que ecología y economía puedan ir de la mano” expone López.
Ventajas de los Automóviles Eléctricos en Colombia
Sostenibilidad Ambiental: Según datos del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, los vehículos eléctricos reducen en promedio un 70% las emisiones de CO2 en comparación con los vehículos de combustión interna.
Menor Costo de Mantenimiento: Estadísticas de la Asociación Nacional de Movilidad Sostenible indican que los autos eléctricos pueden tener un 30% menos de costos de mantenimiento debido a su menor cantidad de piezas móviles.
Eficiencia Energética: Según estudios de la Agencia de Energía Sostenible, los vehículos eléctricos tienen una eficiencia energética de aproximadamente el 90%, mientras que los vehículos de gasolina apenas llegan al 20%.
Desafíos y Desventajas de los Vehículos Eléctricos en Colombia
Infraestructura de Carga Limitada: A pesar del crecimiento, datos del Ministerio de Transporte muestran que Colombia cuenta con alrededor de 2,500 puntos de carga pública, lo que aún es insuficiente para la demanda actual.
Costo Inicial Elevado: Según la Cámara de Fabricantes de Automotores, el precio de un vehículo eléctrico es, en promedio, un 30% más alto que un vehículo de combustión interna similar.
Autonomía y Tiempo de Carga: Datos recientes de usuarios reportan una autonomía promedio de 250 a 350 km con una carga, aunque el tiempo de recarga puede oscilar entre 4 y 8 horas en cargadores convencionales.
La transición a los vehículos eléctricos en Colombia muestra claras ventajas en términos ambientales y de eficiencia, aunque aún se enfrentan desafíos significativos, particularmente en infraestructura y costos iniciales. “Para acelerar el cambio ya existen normativas, sin embargo, el informe destaca la necesidad de que la administración garantice su cumplimiento; establecer programas públicos municipales de infraestructura de recarga igual que ocurre con el alumbrado público; y sobre todo mantener este tema al margen de disputas políticas para trabajar en conjunto el sector público y el privado” expone López y añade, “es imprescindible hacer una labor de concienciación para generar mayor compromiso en la sociedad, evitando mensajes catastrofistas o contradictorios”.