El aval otorgado por la
Asociación colombiana de Endocrinólogaía, Diabetes y Metabolismo (ACE) a la
información generada por Fenavi en lo que respecta al consumo de pollo, valida
la importancia de la información cuando de nutrición y salud se trata.
Esta alianza contribuye a generar contenidos que permitan
desmitificar las falsas creencias sobre el consumo del pollo y por el
contrario, resaltar los beneficios de este alimento, respecto a las diferentes
etapas del desarrollo del ser humano.
Andrés Valencia, Presidente Ejecutivo de Fenavi, señaló
que “Nuestro compromiso con la nutrición de los colombianos nos ha llevado a
generar alianzas con actores clave, como es el caso de la Asociación colombiana
de Endocrinología, Diabetes y Metabolismo, de manera que se desmitifiquen
ciertas creencias populares alrededor del consumo de pollo”.
Uno de las falsas creencias del pollo y que continúa
siendo razón de debate de muchas personas, es el uso de hormonas en la crianza
de estas aves de corral. Sin embargo, el Dr. PhD Nick Dale de la Universidad de
Georgia en Estados Unidos, desmiente esta idea y comenta a través de dos
razones muy importantes que: primero que todo, la hormona de crecimiento, al
igual que la de la insulina entre otras, es una hormona de tipo proteico que,
de ser puesta en la comida, sería destruida por los ácidos gástricos al momento
de ser ingerida.
Segundo, es que muchos creen que esta hormona podría ser
inyectada, pero el doctor Dale explica
que este proceso sería muy complejo desde el punto de vista logístico, pues
implicaría inyectar a todos los pollos de un corral, que en el caso de
Colombia, ascienden a más de 65 millones en un mes, más de 2 millones de pollos
diarios, además de que el costo sería de aproximadamente de 140 dólares por
pollo, un precio que excedería por mucho el costo de cada ave, que oscila entre
los 5 y los 8 dólares.
Asimismo, Álvaro Willis, profesor especial de la
Universidad Nacional, Zootecnista y especialista en nutrición animal, comenta
que en Colombia no está autorizado bajo ninguna regulación el uso de hormonas
en las aves. En caso de que se utilizaran, a través de vía oral, el animal lo
descompondría en el momento de consumirlo. Esto es un mito urbano que se ha
venido presentando desde los años 50 y está en el imaginario de la poblaciónón
en general. Esta creencia es falsa porque en definitiva el pollo se degrada, no
hay necesidad y hacer esta práctica sería dispendiosa respecto a los costos no
rentables.
“El crecimiento de los pollos en uno de los aspectos más
interesantes respecto al ámbito genético. Para llegar al pollo que consumimos
hoy en día, se hace una serie de combinaciones de llíneas genéticas, que vienen
desde los abuelos y padres. Básicamente lo que se ha hecho es escoger animales
que tengan la capacidad de convertir los nutrientes que reciben más rápidamente
y puedan crecer de una manera más eficiente. Todo esto se debe al gran avance
respecto a los estudios de genética, acompañado de los importantes desarrollos
acerca de la nutrición del pollo”, enfatizó Álvaro Willis.
Beneficios de comer pollo
Existen diferentes razones para incluir el pollo en el
consumo diario, es un alimento nutritivo, versátil y fácil de preparar para
toda la familia, sus bondades son variadas:
Para la familia
Aporta vitaminas B3, B5, B6 Y B12, que ayudan a la
producción de sangre y el funcionamiento del sistema cardiovascular, sus grasas
insaturadas ayudan a proteger la salud del corazón. Se digiere fácilmente y
ayuda a mantener el peso ideal de todos los integrantes de la familia.
Para los deportistas
Ayuda a formar y reparar los tejidos del cuerpo, es más
saludable que otras carnes porque tiene menos grasa y aporta importantes
sustancias nutritivas, ayuda al rendimiento muscular, es fuente de vitaminas
del complejo B que participan en la transformación de los carbohidratos, como
los almidones azúcares en energía.
Para los niños
Es una excelente fuente de proteínas, que favorecen el
crecimiento y desarrollo de músculos, huesos y órganos a partir de los ocho
meses de edad. Contiene zinc, mineral indispensable para el crecimiento y la
salud de la piel. También contiene fósforo, vital para fortalecer huesos y
dientes.