Andrés Felipe Medina Grass
En el tercer trimestre,
el déficit en la cuenta corriente se continuó cerrando y alcanzó los 1.680
millones de dólares, representando el 1,7% del PIB. Este valor fue el más bajo
desde 2004 para un tercer trimestre y compara muy bien con el 6,2% de finales
de 2022. Esta cifra muestra las necesidades de ahorro del exterior que tiene el
país, la diferencia entre la inversión y el ahorro local y, por supuesto, que
se reduzca es bueno. Sin embargo, las razones de este cierre son menos buenas
que otras: responden al proceso de contracción que ha experimentado la demanda
interna en lo corrido de este año, que a septiembre cae 3,7%. En detalle por la
caída de la inversión, el menor consumo de bienes durables y la menor demanda
por bienes intermedios que ha llevado a una disminución pronunciada de las
importaciones. Las razones que serían mejores y no se están dando: un
incremento de los ingresos vía exportaciones u otras fuentes, un aumento importante
del ahorro doméstico.
En cifras, el principal
elemento que explicó el cierre del déficit en cuenta corriente fue la reducción
del 67,1% anual del déficit comercial (la diferencia entre exportaciones e
importaciones) respecto al mismo trimestre de 2022, pasando del 5,1% al 1,5% del PIB. Las protagonistas
de la reducción del déficit comercial fueron las importaciones, que a
septiembre han caído un 20,9%. Las importaciones de bienes de capital
(asociadas a la inversión) y de materias primas y bienes intermedios (asociados
a producción y demanda interna) han caído un 22,4% y 24,5% respectivamente. El
déficit se financia con inversión extranjera directa más que proporcionalmente,
que fue del 3,4% del PIB en el tercer trimestre de 2023.
Este comportamiento del
déficit externo, nos deja la tarea de consolidar un número que sea sostenible
basado en un mayor dinamismo de las exportaciones y de los flujos de recursos
del exterior relacionados con remesas, por ejemplo, y menos con reducciones de
las importaciones. El año entrante, la demanda interna ganará dinamismo y por
una mejora en la inversión, traerá aumento en las importaciones.