A lo largo de los últimos años, se ha venido produciendo una revolución en la manera de trabajar y vivir a nivel global. Por primera vez en la historia, más de la mitad de los habitantes del mundo se están mudando a las grandes ciudades, y para 2050, se estima que el 70% de la población mundial ya estará viviendo en ellas.
Al tiempo, se está presentando otro hecho que impactará y cambiará las dinámicas del trabajo en el mundo, pues para el próximo año, se estima que más del 50% de la fuerza laboral global serán Millennials, una generación que viene desafiando el statu quo, que busca motivaciones laborales diferentes a las de las generaciones pasadas, y que anhela conexiones en un mundo que se siente cada vez más desconectado.
¿Dónde trabajaremos?, ¿Cómo viviremos? y ¿Cómo enfrentaremos el futuro en una economía que involucre a todas las comunidades en nuestras ciudades?, son quizás las preguntas más importantes que gobiernos y el sector privado se llevan haciendo durante los últimos tiempos.
WeWork en 2010 generó una respuesta transformadora a estas preguntas y llevó a que los empresarios y sus equipos tuvieran una relación diferente con las ciudades, con el trabajo y con las personas, creciendo conjuntamente. La compañía, y su disruptivo modelo, llegó a Colombia en 2017 con el fin de ayudar a las personas a desbloquear su potencial, encontrar un propósito y eliminar barreras para que las empresas, junto con sus colaboradores, crecieran juntos.
La multinacional con presencia en más de 29 países vio en Colombia una economía en crecimiento que lo convertía en el referente y en el polo de desarrollo de negocios de la región. Fue el tercer mercado donde WeWork inició operaciones en América Latina, con el objetivo de impactar al ecosistema local y conectarlo con la comunidad empresarial física más grande del mundo, creando un efecto de crecimiento en ellas. La compañía satisface la necesidad que tienen las personas de colaborar para ser más felices, para romper barreras, conectarse con otros seres y construir un mundo mejor.
Hoy, 2 años después de su llegada al país, cuenta con 8 edificios abiertos en Bogotá, 1 en Medellín, y está próxima a abrir su primera ubicación en Barranquilla, el segundo en Medellín y el noveno en la capital, exactamente en el barrio Colina Campestre.
El modelo de WeWork ha ayudado a empresas de todos los tamaños y sectores a poner en práctica la cultura de colaboración, la inteligencia colectiva y la eliminación de barreras entre sus equipos al mismo tiempo que mejora la calidad de vida y potencializa la productividad de todos los colaboradores. De igual manera ha comprobado que al propiciar encuentros de personas de diferentes áreas, se crea el escenario ideal para efectuar alianzas, concretar ideas y potencializarlas para hacerlas realidad.
En Colombia, el 51% de los miembros aseguran que el modelo les ha ayudado a acelerar su negocio y el 78% ha atraído y retenido el mejor talento para su organización.
Algunas de las empresas en Colombia que ya cuentan con WeWork como un aliado para afrontar el futuro del trabajo e incorporar exitosamente la nueva fuerza laboral global son Latam Airlines, Philip Morris, AirFrance - KLM, Natura, Colsubsidio, Pernod Ricard, AT&T, Roché, Mars, Grin, Spotify, entre otros.
Antes de la llegada de WeWork al país, pocos se habían atrevido a apostarle a la co-creación y a los espacios de trabajo compartidos para potenciar la creatividad y productividad de sus equipos. La compañía puso sobre la mesa la cultura de colaboración para que las personas y empresas crezcan al mismo ritmo, se incentive la creatividad y se logre una verdadera transformación positiva en las ciudades y en los entornos laborales.