Durante los últimos años el número de personas tatuadas ha aumentado considerablemente, así como aquellos que optan por tratarlos. En tal sentido, la amplia gama de colores presentes en los tatuajes modernos puede verse como un desafío para su tratamiento.
La doctora Natalia Zuluaga, de la clínica Dra. Luz Marina Díaz (www.draluzmarinadiaz.com/), aseveró que para remover un tatuaje la efectividad del procedimiento depende de varios factores, como los siguientes:
Los diferentes pigmentos o colores del tatuaje. Hay colores que son más difíciles de tratar con un láser.
La profundidad de la tinta o pigmentos del tatuaje.
Ubicación del tatuaje.
Tipo de piel.
Cantidad de tinta.
La duración del tatuaje en la piel.
Destacó que en la clínica Dra. Luz Marina Díaz se utiliza un laser Nd: YAG Q-Switched, que "es actualmente el mejor y mas seguro para realizar este procedimiento. Aplicando pulsos de láser sobre las capas superiores de la piel se evidencia cambio de los pigmentos del tatuaje", lo cual se debe al calentamiento y efecto fotoacústico que alcanza por milésimas de segundo la energía del láser, logrando fragmentar en partículas más pequeñas el pigmento, permitiendo que el proceso normal del cuerpo los elimine naturalmente por nuestro sistema inmunológico
Agregó la especialista que "si estás decidido a tratar un tatuaje te respondemos algunas preguntas frecuentes sobre este tratamiento":
¿Se puede eliminar un tatuaje por completo?
Dependerá en gran parte del color de la tinta y de la técnica utilizada a la hora de realizar el tatuaje. Los colores oscuros son los que mejor responden al tratamiento con láser, mientras que el más difícil de eliminar es el color verde, por lo que es posible que en estos casos no consigamos eliminarlo del todo.
Los tatuajes realizados por un amateur suelen responder más rápidamente y requieren de menos sesiones que los tatuajes profesionales, debido a la menor estabilidad de la tinta utilizada. Así mismo, en los tatuajes amateur suele haber una menor densidad en los pigmentos utilizados y, por tanto, es más fácil tratarlos.
Los tratamientos pueden conseguir resultados muy satisfactorios y hacer que prácticamente no se aprecien restos del pigmento del tatuaje. Pero también te tenemos que contar que es posible que quede alguna zona residual (siempre muy atenuada) que sea resistente al tratamiento.
¿Cómo se consigue quitar la tinta del tatuaje de debajo de la piel?
Los pulsos de alta potencia y con breves tiempos de exposición producen un daño térmico que consigue la fragmentación y disgregación de las partículas que contienen el pigmento del tatuaje. Posteriormente, estas partículas fragmentadas son reabsorbidas y eliminadas por los macrófagos, células de nuestro organismo especializadas en eliminar residuos por vía linfática.
¿Cuánto tiempo se necesita para tratar un tatuaje?
La duración del tratamiento está condicionada por las características de cada tatuaje, pero suele ser necesario un promedio de unas 4 a 6 sesiones. Las sesiones se realizan cada seis u ocho semanas.
¿Cuánto dura cada sesión láser?
Las sesiones tienen una duración aproximada de entre 15 a 30 minutos, siempre dependiendo del tamaño del tatuaje.
¿Cuándo se empiezan a notar los primeros resultados?
Es posible apreciar cambios a partir de la primera sesión, aunque es gradualmente que se va observando como el pigmento del tatuaje se va atenuando y perdiendo su forma original.
¿Qué cuidados son necesarios después del tratamiento?
Inmediatamente después de la sesión de láser, la piel adquiere una tonalidad blanquecina e inflamada. A los pocos minutos, la zona tratada puede tener un tono rojizo que desparecerá en 24 horas como mucho. Se aplican protectores cutáneos y reepitelizantes que induzcan a la cicatrización. Después de cada sesión, se forman pequeñas costras que irán cayendo poco a poco al cabo de ocho o diez días aproximadamente.
¿En qué pacientes está contraindicado?
- Embarazadas
- Pacientes con patologías del colágeno
- Lactancia materna
- Piel recién bronceada
- Fotosensibilidad por enfermedad o fármacos(isotretinoina)
- Coagulopatias
- Procesos agudos o crónicos inflamatorios de la piel
- Cáncer (Cáncer de piel)
- Riesgo de cicatrización hipertrófica o tipoqueloide
- Historia de hiper o hipopigmentación con tratamientos, dermatológicos o láser.
- Estados de inmuno supresión
- Diabetes mal controlada
- Herpes activo
¿El tratamiento láser para eliminar un tatuaje puede dejar cicatriz?
El láser ND/Yag Q-Switched raramente puede dejar una cicatriz. Pero es muy importante proteger la zona tratada del sol y aplicar los tratamientos tópicos.
Respecto a los posibles efectos secundarios, se producen muy raramente, pero existe el riesgo de un cambio de textura en la piel de la zona tratada o la posibilidad de que pueda quedar alguna zona con despigmentación.
¿Puede realizarse la depilación láser sobre un tatuaje?
No, no se puede realizar depilación láser sobre un tatuaje. El efecto del láser podría deformar el tatuaje, incluso llegar a eliminar parte de él. Debemos tener en cuenta que la melanina o el tinte en este caso actúa como cromóforo (atrae la luz láser) y quemaría la zona tratada.
La técnica de depilación láser consiste en detectar la melanina, que es lo que aporta color al vello, haciendo más sencillo quemarlo de raíz para su efectiva supresión. El inconveniente es que si detecta la tinta del tatuaje como si de la melanina se tratara, podría quemar esa parte de la piel, modificando la pigmentación y destruyéndolo.
¿Puedo tatuarme después de depilarme con láser?
Sí, incluso es lo recomendable, ya que la persona no tendrá que preocuparse porque el vello tape su tatuaje. Lo cierto es que no resulta muy estético un tatuaje donde ha crecido el pelo y, por lo general, la persona prefiere mostrar su dibujo en la piel por encima de todo.