Por Alejandro Callejas Aristizábal
Gerente de Camacol Bogotá y Cundinamarca
Superar las fronteras y entender las nuevas realidades políticas y geográficas es el punto de partida para lograr construir una región integrada y conectada, donde se identifiquen claramente los proyectos estratégicos en común y que estos sean el motor de impulso para los diferentes municipios. Esto representa un desafío para las administraciones que inician el próximo primero de enero, ya que tendrán el reto de reformular su ordenamiento territorial y proponer planes de desarrollo que le apuesten a la integración de manera equitativa y sostenible.
Este desafío no es ajeno a cada ciudadano y por supuesto al sector privado. Como representantes de una actividad que aporta a la construcción física de la ciudad y la región, Camacol Bogotá y Cundinamarca se suma responsablemente a afrontar este reto y continúa contribuyendo a la solución del déficit de vivienda, al desarrollo urbano sostenible apostándole a la construcción de ciudades de calidad, al crecimiento económico y a la generación de empleo.
El nuevo panorama resulta una gran oportunidad que entre todos se debe potenciar. Si bien es deber del sector público generar las condiciones para hacer de la integración el pilar del crecimiento, los gremios, las empresas y los ciudadanos en general están llamados a rodear las buenas propuestas, facilitar la materialización de los proyectos y ser veedores de los recursos y la transparencia de la ejecución.
Como históricamente lo ha hecho, la Regional seguirá en el trabajo mancomunado para lograr concretar proyectos que organicen el espacio de los ciudadanos generándoles calidad de vida. Para esto, tiene toda la disposición de poner al servicio de la región las herramientas, el conocimiento técnico y la experiencia que le permite aportar propositivamente.
Las condiciones están dadas, y lo que corresponde ahora es unir esfuerzos en beneficio del desarrollo del sector, de la ciudad y la región.
Este desafío no es ajeno a cada ciudadano y por supuesto al sector privado. Como representantes de una actividad que aporta a la construcción física de la ciudad y la región, Camacol Bogotá y Cundinamarca se suma responsablemente a afrontar este reto y continúa contribuyendo a la solución del déficit de vivienda, al desarrollo urbano sostenible apostándole a la construcción de ciudades de calidad, al crecimiento económico y a la generación de empleo.
El nuevo panorama resulta una gran oportunidad que entre todos se debe potenciar. Si bien es deber del sector público generar las condiciones para hacer de la integración el pilar del crecimiento, los gremios, las empresas y los ciudadanos en general están llamados a rodear las buenas propuestas, facilitar la materialización de los proyectos y ser veedores de los recursos y la transparencia de la ejecución.
Como históricamente lo ha hecho, la Regional seguirá en el trabajo mancomunado para lograr concretar proyectos que organicen el espacio de los ciudadanos generándoles calidad de vida. Para esto, tiene toda la disposición de poner al servicio de la región las herramientas, el conocimiento técnico y la experiencia que le permite aportar propositivamente.
Las condiciones están dadas, y lo que corresponde ahora es unir esfuerzos en beneficio del desarrollo del sector, de la ciudad y la región.