Desde hace 4 años y a 900 metros de altura en la Sierra Nevada de Santa Marta, nació “Nevada”, una cerveza artesanal elaborada con agua mineral de manantial y bajo el distintivo 100% natural.
Nevada Cervecería, es una firma independiente con gran aceptación, que pasó de producir 8.000 litros de producto en su primer año, a 50.000 litros durante 2018, reflejando así una tasa de crecimiento de más del 35% anual. Esta producción se desarrolla en “La Victoria”, la finca cafetera con el beneficiadero de café más antiguo del país, la cual se encuentra ubicada a las afueras del corregimiento de Minca, convirtiéndose en un importante punto turístico que ofrece recorridos guiados por sus instalaciones para curiosos y expertos en esta bebida.
De acuerdo con Lucas Echeverri, creador, fundador y socio de Nevada Cervecería, “nuestra cerveza fue creada para consumidores exigentes que buscan perfección en productos naturales, con esto en mente, hacemos una bebida solamente con agua, malta de cebada, lúpulo y levadura. No añadimos ningún químico para tratar el agua, que es pura de nacimiento y la cual llega directamente del manantial y es filtrada durante cientos de años por rocas de la Sierra. La espuma es creada por la levadura y no se somete a procesos de filtración o pasteurización. Su tiempo de maduración oscila entre 30 y 35 días para cervezas tipo Ale, y entre 55 y 60 días para tipo Pilsen. Esto convierte a Nevada en la única bebida de este tipo, libre de tratamientos”.
Cabe destacar que las materias primas son las mejores del mercado, así como responsables con el medio ambiente, (La cervecería hace parte del Fondo de Agua de Santa Marta, proyecto liderado por la Fundación Pro-Sierra Nevada de Santa Marta, The Nature Conservancy, el BID y con el financiamiento de la Fundación Mario Santodomingo). De hecho, Nevada es la primera empresa privada en afiliarse a este proyecto y aporta $100 por cada litro vendido, con el propósito de preservar el agua de esta zona. Parte del éxito del producto es la asociación con Jonas Koghberger, reconocido maestro cervecero alemán, quien ha hecho posible que esta bebida sea una realidad. De esta forma, las cervezas bajo este sello (Happy Tucan, Happy Nebi, Happy Colibrí y Happy Coca), reciben su nombre gracias a cada una de las especies representativas del ecosistema local, haciendo honor al agua, el aire y a su biodiversidad.
Actualmente, las diferentes variedades de esta cerveza artesanal se encuentran disponibles en los restaurantes Bandido, KO y La Nacional, así como en Amor Perfecto, Beer Lover de la calle 93, El Sindicato y UDARA Cowork, en la ciudad de Bogotá.