En el país, se presentan alrededor
de 8 mil nuevos casos por año de cáncer de seno, pero no hay datos exactos de
cuántas personas en total lo padecen porque no hay un censo al respecto.
Así lo dio a conocer el doctor Fernando Perry, mastólogo
adscrito a la plataforma Top Doctors (https://www.topdoctors.com.co/), quien
agregó que el cáncer de mama puede afectar también a varones, aunque la
proporción es de 1 caso por cada 200 en mujeres.
En Colombia, de cada 10 mujeres que acuden a consulta para
saber si tienen cáncer de mama, en 4 o 5 pueden detectarse quistes que, en su
mayoría, resultan benignos, según la plataforma Top Doctors* (1).
De acuerdo con la Sociedad Americana Contra el Cáncer* (2),
junto con el cáncer de piel, el de seno es el más común entre las mujeres
estadounidenses y el riesgo promedio de una mujer de padecerlo en algún momento
de su vida es de aproximadamente un 12%.
Autoexamen
De acuerdo con el doctor Perry, en sus primeras fases, esta
enfermedad no produce síntomas como dolor, picadas, ardor o cualquier otro tipo
de malestar. Esta característica hace mucho más relevante el auto chequeo
porque es precisamente en las primeras etapas cuando la enfermedad tiene más
probabilidades de ser curada. “A veces se detecta por la palpación del seno y
otras por secreción en el pezón, pero digamos que la manifestación casi siempre
se da por apariencia o por palpación”.
El principal mensaje de prevención insiste en la
importancia da el autoexamen una vez al mes. Las mujeres que están en su época
fértil lo deben realizar en la primera semana luego de la menstruación,
mientras que aquellas que tienen la menopausia deben hacerlo siempre el mismo
día todos los meses.
“El autoexamen permite que la propia paciente detecte
cualquier anomalía y acuda al médico para poder verificar si se trata o no de
cáncer de seno a través de imágenes por mamografía o ecografía”, enfatizó el
especialista afiliado a Top Doctors.
¿Cuáles son los tratamientos?
Según afirma Perry, entre los tratamientos médicos para el
cáncer de seno, están la cirugía, quimioterapia, radioterapia, hormonoterapia y
terapia dirigida, o una combinación de estos.
Como primera medida, es clave un diagnóstico temprano para
evitar tratamientos agresivos que alteren más la calidad de vida de las
pacientes.
Hay que tener en cuenta que, cuando se logra un diagnóstico
oportuno de cáncer de mama, la esperanza de vida aumenta en el 92% de los
casos* (3).
Condicionantes
Aseveró el especialista que la mayoría de los casos “se
catalogan como una variedad conocida como esporádica, es decir, no tienen una
causa conocida ni tienen que ver con enfermedad genética ni con un factor
específico conocido”.
Otro condicionante en el cáncer de seno es la incidencia
familiar y la predisposición genética que, aunque suelen confundirse, no son lo
mismo. El primer caso, se relaciona con personas cuyos familiares cercanos han
padecido cáncer de mama. No significa necesariamente padecer la enfermedad,
aunque sí aumenta el riesgo. El segundo no se relaciona con la familia, sino
con una predisposición genética de la persona. El cáncer de mama como
enfermedad genética afecta a menos del 3% de la población.
El mastólogo Fernando Perry explica que un pequeño porcentaje
en las familias con alta incidencia de cáncer pueden presentar una enfermedad
genética, es decir, mutaciones en los genes, lo que conduce a una enfermedad de
carácter hereditario. Sin embargo, “la mayoría de las veces, el cáncer de seno
está causado por factores ambientales, de estilo de vida o envejecimiento”.