A pesar de su rápido crecimiento en el mundo, el e-comerce
(comercio electrónico) en Colombia no alcanza todavía niveles significativos en
el total de las ventas del comercio, en parte porque los consumidores están en
proceso de adaptación y en el mercado no hay suficientes ofertas.
En los
dos últimos años, las compras de los colombianos por medios electrónicos
crecieron a una tasa promedio del 35%, superando en 2013 los 2.500 millones de
dólares, una suma apenas cercana al 0,2% del Producto Interno Bruto del país,
según estimaciones de la Cámara Colombiana del Comercio Electrónico (CCCE).
De
hecho, el año pasado las ventas de las grandes superficies (Éxito, Jumbo,
Olímpica, Home Center, entre otras), las mismas que empiezan a apostar por este
negocio, superaron los 30 billones de pesos, muestra del fuerte peso que sigue
teniendo el canal tradicional en el país.