Por William Díaz TafurActualmente se encuentran múltiples opciones de inversión en Colombia, desde las tradicionales como los CDT, hasta aquellas financieramente sofisticadas que se han popularizado en los últimos años y que corresponden a la gama de las inversiones alternativas, que brindan la posibilidad de acceder a los instrumentos de vanguardia a nivel internacional, pero con recursos menores a los que se exigen en los mercados globales.
De esta manera, declara Manuel Felipe García Ospina, de investigaciones Económicas y Asset Allocation de Skandia Colombia, se encuentran instrumentos que le “apuestan” al comportamiento de bienes básicos o programas computarizados que siguen tendencias del mercado. Igualmente, muchos agentes financieros ofrecen portafolios que cubren todos los perfiles de riesgo que pueden tener los inversionistas, desde el conservador hasta el agresivo.
El tipo de inversión
Lo importante, es buscar un experto que asesore a la persona o empresa en el tema, para que pueda tener los mejores rendimientos de acuerdo al perfil de riesgo y al objetivo que se haya trazado. Desde el punto de vista de mercado y de oportunidades actuales, empiezan a ser atractivos activos que sufrieron una gran desvalorización el año pasado y que se encuentran con valorizaciones interesantes. Entre estos se encuentran las acciones.
García resalta que este tipo de inversión es volátil y el inversionista que quiera acceder a estas debe estar preparado para soportar volatilidades que se van a seguir presentando en lo que queda de 2009.
En el intermedio también se encuentran toda una gama que van desde los bonos hasta las mencionadas acciones. Muchas de estas inversiones tiene, por ejemplo, una garantía de capital, lo que significa que, en el peor de los casos, el interesado recibe los recursos invertidos, así la rentabilidad haya sido negativa.
Igualmente, una persona conservadora debe tener un portafolio enfocado en activos de renta fija y posiciones de corto plazo. Además, la diversificación es la estrategia que durante 2008 demostró ser ganadora, con “los huevos” en diferentes activos.
En el caso de Fiduagraria
Por parte de Fiduagraria, ha desarrollado distintos tipos de inversión. Uno que se encuentra ya cerrado es el fondo de inversión forestal, que tiene como gestor a LatinAmerican Enterprise Fund Managers. La empresa ha recaudado plata de fondos de pensiones y compañías de seguro, y ofrece al lado de un gestor profesional una opción de inversión a largo plazo.
El fondo tiene un valor aproximado de US$27 millones y cuenta con el apoyo del Ministerio de Agricultura y el Programa AIS – Fondo de Capital de Riesgo.
Adicionalmente, tiene una cartera colectiva llamada Confirenta, que ha tenido un importante crecimiento durante el 2.009. En enero estaba en $300.000 millones y cerró el semestre con $550.000 millones - ofrece rendimiento variable -.
En los próximos días estará lanzando al mercado la cartera colectiva Agrorenta, la cual esta diseñada para invertir en productos del campo colombiano a través de títulos de la Bolsa Nacional Agropecuaria. Todos los productos tienen rendimientos variables.
Cultura de inversión en Colombia
En general, desde el 2006 hacia acá se ha visto un desarrollo bastante interesante de los mercados de inversión en Colombia, aseveró Manuel Felipe García Ospina, de Skandia. Aunque aún falta un desarrollo mucho mayor, se puede decir que el cliente colombiano tiene la posibilidad de acceder a una gama completa de opciones de inversión.
Quizá dentro de algunos años, el mercado de derivados sobre bonos y acciones permita equipar el mercado del país a lo que se pueda encontrar afuera. Sin embargo, es importante anotar que toda la sofisticación que pueda darse en los mercados financieros tiene que venir acompañada de educación financiera, de forma tal que los inversionistas locales entiendan que las posibilidades se amplían, pero que también tienen que empezar a analizar el riesgo asociado a cada instrumento y que no todo es rentabilidad, existiendo otras muchas formas de medir el desempeño de una inversión.
En Fiduagraria, por otra parte, consideran que en el país el mercado de capitales esta creciendo de forma dinámica y rápida, siendo una herramienta básica para el desarrollo económico de cualquier sociedad. En esta firma esperan que sectores como el agropecuario y agroindustrial pronto entren en esta dinámica, a lo que agregan que “la Superintendencia Financiera ha venido fortaleciendo las prácticas de gobierno corporativo, lo que conduce a la democratización accionaria de las empresas y al respeto por que las posiciones minoritarias sean más fuertes”.
Las opciones
Las inversiones, cualquiera sea su categoría, siempre serán atractivas puesto que la inversión es una oportunidad de alcanzar objetivos personales, familiares o empresariales, a la vez de ser un motor importante del desarrollo de un país. La evidencia ha demostrado que las inversiones reguladas son las que deben llamar la atención de los inversionistas colombianos, puesto que las supuestas inversiones que ofrecen muy altos rendimientos en corto plazo han demostrado más perjuicios que beneficios a un gran porcentaje de población.
Igual, es importante tener en cuenta el objetivo que se traza con la inversión. Hay inversiones de corto plazo, como ahorrar para vacaciones; o las de más largo plazo, como las que se utilizan para la compra de vivienda. En el caso de la educación, como afirma García Ospina, de Skandia, es una inversión con un objetivo de muchos años y de un plazo de tiempo muy amplio. Para lograr este objetivo, existen varios caminos.
El más conocido y popular es el de los seguros educativos, que garantizan que con una suma fija aportada al principio se garantiza el pago de la universidad en un tiempo determinado futuro.
Hay otras rutas que lo pueden llevar a lograr el mismo objetivo, como sería una inversión en acciones, puesto que la evidencia ha demostrado que en el largo plazo logran rendimientos positivos e interesantes, a pesar de correcciones momentáneas a la baja, típicas de los mercados.
Así mismo, dan a conocer en Skandia, lo interesante de las nuevas alternativas de inversión radica en que, a diferencia de los mercados internacionales, en Colombia se puede acceder a las mismas mediante montos de inversión relativamente pequeños, que se ajustan al presupuesto de inversión de una gran cantidad de colombianos. Así, se puede encontrar que en el mercado internacional una inversión requiera de un capital mínimo de US$250 mil, mientras que un producto similar en Colombia puede requerir 5 mil dólares. Adicionalmente, los productos tradicionales requieren de montos muy pequeños, accesibles a toda la población.
Lo importante es tener claro lo que se quiere y ajustar los objetivos que se quieren lograr con la inversión que se quiera realizar. No hay una inversión mejor que otra, todo depende de los objetivos que se quieran alcanzar y el perfil de riesgo que tenga el inversionista.
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