martes, octubre 01, 2019

Se requiere acción conjunta para que el café sea sostenible, según informe de la Universidad de Columbia


En el Día Internacional del Café, el Centro de Columbia sobre Inversión Sostenible (CCSI, las siglas en inglés) difundió un informe ampliamente esperado: “Garantizar la viabilidad y sostenibilidad económica de la producción de café”.
El estudio, liderado por el Profesor Jeffrey Sachs, fue comisionado por el Foro Mundial de Productores de Café (FMPC) tras su primera reunión en 2017 en Medellín, Colombia, donde productores de todo el mundo se reunieron para discutir formas de abordar la crisis de los bajos precios del café. Las conclusiones preliminares del informe se presentaron en el segundo FMPC en julio pasado, en Campinas, Brasil.
El informe analiza las causas fundamentales de los bajos precios del grano, que han diezmado el sustento de muchos productores de café a pesar de los altos precios que los consumidores suelen pagar por una bebida muy demandada en todo el mundo.
El informe también describe los resultados de los nuevos modelos cuantitativos de oferta y demanda que miden los posibles impactos del cambio climático. Los modelos proyectan que, para 2050, el 75% de la tierra apta para la producción de café arábigo y 63% de la tierra para la producción de café robusta se perderán debido al cambio climático, aunque la cantidad de tierra apta restante aún será superior a la actual cantidad total de tierra con cultivos de café.
Los modelos también muestran que no se espera que los precios del café se recuperen significativamente sin alguna intervención, dado el potencial de una mayor producción de bajo costo en Brasil.
Con base en estos hallazgos, el Profesor Sachs hizo un llamado a la industria cafetera y a los países productores a que trabajen articuladamente para garantizar la sostenibilidad. “Ante los actuales bajos precios y la creciente crisis climática, el sector cafetero debe emprender grandes esfuerzos concertados para apoyar un futuro sostenible y resiliente para los productores y el sector en su conjunto", anotó.
Roberto Vélez, Gerente General de la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia (FNC), dijo: "La cadena de valor del café vale entre 200 mil millones y 250 mil millones de dólares al año, de los cuales los productores reciben menos de 10%. Muchos caficultores en la mayoría de países productores ni siquiera pueden cubrir sus costos de producción; eso simplemente está mal. La industria cafetera no puede pretender ignorar la gravedad de la situación. La sostenibilidad económica debe abordarse de inmediato bajo un principio de corresponsabilidad si queremos garantizar la calidad, diversidad y sostenibilidad del café que los consumidores esperan en todo el mundo”.
Para lograr la sostenibilidad social, ambiental y económica de toda la cadena de suministro del café, el informe del CCSI aboga por el desarrollo de planes nacionales de sostenibilidad cafetera y aportes de los principales actores de la industria de hasta medio centavo de dólar por taza para un Fondo Mundial del Café. Estos recursos ayudarían a llenar críticas brechas de financiamiento para las inversiones de sostenibilidad en regiones productoras de café y se utilizarían para apalancar fondos adicionales de gobiernos y donantes. El informe también incluye otras recomendaciones para mejorar la rentabilidad de los productores de café.
“El trabajo serio e independiente del Prof. Sachs y su equipo del CCSI agitará la discusión sobre el futuro de la cadena de valor del café. Ninguno de los actores (productores, comercializadores, tostadores y consumidores, sean públicos o privados) puede permitirse permanecer al margen del trabajo conjunto necesario para volver la cadena de valor del café ambiental, social y lo más importante, económicamente sostenible. El mayor depredador del medio ambiente y del tejido social es la pobreza”, dijo Juan Esteban Orduz, director de la FNC en Norteamérica y coordinador del FMPC.
“Sin una acción conjunta sostenida, lo que incluye aportes precompetitivos de tostadores y minoristas, más productores de café estarán en extrema pobreza, y los orígenes se concentrarán en cada vez menos países. La industria corre el riesgo de perder mucha de su diversidad y resiliencia. Los principales tostadores y minoristas deberían avanzar en ayudar a garantizar la sostenibilidad de la industria mundial, y los gobiernos y las agencias multilaterales también deberían aumentar su apoyo de la mano de la industria”, agregó el Profesor Sachs.
René León, Director Ejecutivo de Promecafé, afirmó que “es necesario tener una discusión abierta y franca sobre el futuro del café y el impacto negativo de la actual crisis de precios que, de no atenderse, continuará generando más pobreza, inseguridad y migraciones ilegales en todo el mundo. Este informe es un aporte muy importante a tal discusión".
De acuerdo con Ishak Lukenge, presidente de la Asociación Africana de Cafés Finos, “muchos productores han llegado a un punto en que no pueden siquiera cuidar adecuadamente de sus familias, para no hablar de sus fincas o comunidades. En la situación actual, casi monopsónica (un solo comprador), los eslabones más rentables de la cadena de valor, especialmente los tostadores y minoristas, no pueden eludir su responsabilidad y deben asegurar el futuro de toda la cadena".
El informe completo y el resumen ejecutivo se encuentran en http://ccsi.columbia.edu/work/projects/coffee