domingo, mayo 04, 2014

El pabellón de Perú, con récord

Con más de 20 mil títulos y un diseño contemporáneo a la manera de una selva de libros, la librería del pabellón peruano ha tenido el inicio más exitoso de un país invitado hasta la fecha. Adicionalmente, el pabellón, con un promedio de visitantes que supera las expectativas, invita a conocer la cultura de este país. Juan Camilo Sierra, gerente del FCE, da las cifras.
"Nunca habíamos tenido una feria que arrancara con el ímpetu de este año", resalta Juan Camilo Sierra, gerente del Fondo de Cultura Económica (FCE), y el hombre a cargo de la organización de la librería en el Pabellón de Perú de la FILBO, un espacio contemporáneo concebido por Vicca Verde, una de las empresas de diseño arquitectónico más importantes de América Latina.
"Al cierre del sábado 3 de mayo, en el espacio del Pabellón se habían vendido 4.330 libros y 1.100 unidades de artesanías. El éxito ha sido tal que tan solo el primero de mayo vendimos 1.300 libros en la librería del Pabellón", anota.
Pero la relevancia del Pabellón de Perú va mucho más allá de los libros, aunque este sea su núcleo central. "El contenido del Pabellón puede dar para un recorrido de hasta dos horas. Está la exposición 'Mírame, Lima', una cronología de autores, la exposición al poeta Cisneros, una zona gastronómica, un auditorio, un área infantil, zona de artesanías, el camino del Qhapaq Ñam, una zona de pisco peruano y la librería", añade Juan Camilo Sierra.
Por su parte, el arquitecto Mateo Peschiera, creador del espacio del Pabellón, hace referencia al espacio de la Librería como corazón de su propuesta. "Fue concebido como una selva de libros que se descubre al atravesar la cordillera. Este espacio es el foco de atención del pabellón, donde una lluvia de audífonos con sonidos del Perú cae de una nube gris, compuesta de 400 cubos translúcidos colgados a distintas alturas a manera de pixeles gigantes, sobre las mesas literarias. Estos juegos de luces reproducen tormentas amazónicas y efectos en las nubes, mientras se proyectan sobre el cielo y la cordillera elementos del imaginario literario peruano".
Justo ahí, están los libros, provenientes de 63 editoriales peruanas, que participan en la feria luego de una curaduría adelantada por el Ministerio de Cultura de Perú. Además de los títulos propios, como todas las editoriales, su propuesta va más allá de Perú: "Estas editoriales son universales. Allí hay hasta autores ingleses así como el año pasado había libros de William Shakespeare en la muestra que trajo Portugal", añade Sierra.
De esas 63 editoriales, hay privadas, públicas, grandes, medianas e independientes, organizadas por temáticas, con un espacio preponderante para el Nobel peruano, quien además tiene una de las obras más prolíficas.
"Las 63 editoriales peruanas trajeron 1.195 títulos, que llegaron en un total de 14.021 ejemplares. Adicional a estos, hay un grupo de 4.000 libros que trae el Ministerio de Cultura como obsequio y que va desde libros de zonas arqueológicas hasta de gastronomía. Adicional, hay otros 4.000 ejemplares más de editoriales colombianas que publican autores peruanos. A eso se le suman 982 títulos más de 14 editoriales con casa en Colombia, y que sumaron un total de 62 autores peruanos". Una verdadera invasión cultural, en definitiva.
Y con temas variados de editoriales destacadas o independientes como Estruendo Mudo, Paracaídas, Chirre, Editorial Septiembre, Peisa, Megaeditores y lo que trae la Academia Peruana de la Lengua.
Y con todos los autores peruanos. Hasta de Julio Ramón Ribeyro, de quien se cuenta con títulos como Geniecillos dominicales, publicado por la editorial RM, Antología personal publicada por el FCE, Palabras del mundo, publicada por Seix Barral y Los gallinazos sin pluma, a cargo de Megaeditores.