lunes, septiembre 10, 2012

¿EL NUEVO REGIMEN DE REGALIAS PUEDE CONTRIBUIR A ENRIQUECERNOS?

La extracción de los recursos naturales de una nación debe verse compensada en acumulación de capital físico y humano; en caso contrario, no solo no es posible reemplazar la riqueza natural perdida sino que puede generar un empobrecimiento de su población. La senda hacia el enriquecimiento se recorre de la mano de los impuestos y las regalías. Ambas vías son fundamentales para transferir al Estado parte de las rentas derivadas de la explotación de los recursos naturales, para que sea éste quien las invierta de manera eficiente en capital humano, infraestructura pública, conocimiento e innovación. No obstante, durante las últimas dos décadas, mientras estuvo vigente el anterior régimen de regalías, Colombia se empobreció parcialmente en razón a que dicho esquema resultó inequitativo en la distribución e ineficiente en la asignación de las mismas. Asimismo, sus fallas institucionales permitieron prácticas corruptas y despilfarro del dinero. En 2011 el Gobierno Nacional logró la aprobación del acto legislativo que creó un nuevo esquema para distribuir las regalías, proteger estos recursos y mejorar la equidad: el sgr (Sistema General de Regalías). Pese a que el espíritu de esta reforma, sin duda, está bien intencionado, el palo en la rueda ha resultado ser su complejo diseño. Poner a andar la maquinaria del sgr a todo vapor, ha sido enormemente engorroso porque requiere de la operación de una pesada estructura conformada por una Comisión Rectora, unos Órganos Colegiados de Administración y Decisión, un Sistema de Monitoreo, Seguimiento, Control y Evaluación y cuatro nuevos Fondos creados para distribuir las regalías entre las entidades territoriales. En primer lugar, sobre la inversión en la infraestructura regional. Esto es que se paralizó la ejecución de las obras públicas regionales, con efectos nocivos sobre la actividad económica. En segundo lugar, sobre la liquidez en el mercado monetario. Debido a que la estructuración, selección y priorización de los proyectos de inversión a financiar con las regalías toma tiempo, el Gobierno Nacional no pudo girar con suficiente celeridad -como en años anteriores- el dinero correspondiente. Esta situación contribuyó a generar un superávit de caja mayor que en el pasado, el cual debe mantenerse depositado en el Banco de la República. De ahí que se haya desacelerado la base monetaria y los otros agregados, entre otros.